¿Quién no recuerda la famosa ”Mano de Dios"? partido entre Argentina e Inglaterra por los cuartos de final de la copa del mundo disputada en México en 1986, donde el astro argentino Diego Armando Maradona anota un polémico gol con la mano. O aquella controvertida jugada donde el holandés Arjen Robben provoca un penalti inexistente y echa a México del mundial de Brasil 2014. ¿El Fair Play pudo cambiar la historia?
El Fair Play va más allá de un reglamento, el Fair Play promueve grandes valores deportivos como el respeto, la amistad, el espíritu de equipo, la igualdad, el deporte sin dopaje, la atención a las reglas escritas y no escritas, la integridad, la solidaridad, la tolerancia, inteligencia emocional, el cuidado del otro… Todos estos valores son los pilares del "espíritu deportivo".
¿Te gusta la competencia justa? Entonces, comencemos por evitar hacer trampas, engaños, fraudes o amaños. Comencemos por aprender a perder, a ser empáticos con el otro, por aceptar un error y corregirlo, por ser honestos con nosotros mismos y al mismo tiempo predicar con el ejemplo. Estos valores tan importantes e indispensables en el deporte, deberían ser llevados a la práctica en nuestra vida diaria.
Hay muchas historias y ejemplos sobre las actitudes antideportivas, tantas como personas hay en este mundo. Sin embargo, está en nuestras manos cambiar, está en nosotros ofrecer una mano a quien cayó, motivar a quien esté decaído, alentar a otros a ser mejores, reconocer que alguien es mejor y congratularnos por su éxito. Consigue tus objetivos sin pasar por encima de otros. Tan valiosos son tu sueños como los de quien tienes frente a ti.
Claro que es posible jugar limpio, si tienes el espíritu y la convicción de hacer lo correcto.